En una reunión clave para el fortalecimiento de las relaciones internacionales, profesionales de Chile y Perú intercambiaron experiencias y visiones sobre políticas de infraestructura y desarrollo territorial, subrayando la importancia de la colaboración regional para abordar retos estratégicos.

El encuentro contó con la participación de Jorge Gaitán Falconi, de la Dirección General de Política de Promoción de Inversión Privada del Ministerio de Economía y Finanzas del Perú, e Ignacio Araya Areyuna del Departamento de Estadística y Gestión Institucional del Ministerio de Obras Públicas. Durante la reunión, Jorge Gaitán presentó los avances del Plan Nacional de Infraestructura del Perú, que será actualizado cada cinco años. Este plan prioriza un enfoque territorial para identificar proyectos clave y busca involucrar a actores privados y de la sociedad civil para legitimar su implementación. Sin embargo, se destacaron desafíos como la ausencia de mecanismos claros para la entrada y salida de proyectos y la necesidad de articular iniciativas a largo plazo.

Por su parte, Ignacio Araya Areyuna resaltó la falta de una política nacional de infraestructura en Chile, lo que ha llevado a desarrollar un enfoque más descentralizado y participativo. Asimismo, explicó la metodología chilena de asignación de recursos, basada en análisis macroeconómicos y territoriales, con el objetivo de equilibrar las capacidades institucionales con las necesidades del territorio.

Otro tema central fue la gestión del agua en Chile, abordado por Oscar López, quien enfatizó la dispersión institucional que dificulta la planificación y destacó la urgencia de implementar un enfoque integral en este ámbito.

Durante la discusión, ambos países exploraron métodos para vincular las políticas sectoriales con proyectos de infraestructura, reconociendo que esta sinergia es clave para alcanzar un desarrollo más efectivo y sostenible. Además, se analizaron procesos de validación interna con gobiernos regionales y la socialización de los planes con directores locales, como mecanismos para fomentar la participación y legitimidad de los proyectos.

La reunión concluyó con un fuerte compromiso de colaboración futura, reconociendo que el intercambio de experiencias y buenas prácticas fortalece no solo las capacidades nacionales, sino también la cooperación regional en beneficio de sus ciudadanos.